En Chile estamos en verano, y es muy típico ver personas escribiendo mensajes románticos en la arena como el de esta fotografía. Eso me hace pensar en lo que es realmente el amor.
El amor es una decisión, una fuerza que proviene de lo más profundo de nuestro ser. Es algo que no nace con nosotros, sino que se desarrolla desde el nacimiento. No es hereditario, ni adquirido, sino que compartido. El amor es algo maravilloso.
El amor es una decisión, una fuerza que proviene de lo más profundo de nuestro ser. Es algo que no nace con nosotros, sino que se desarrolla desde el nacimiento. No es hereditario, ni adquirido, sino que compartido. El amor es algo maravilloso.
Pero ese amor que está en el mundo no nació en el mundo, porque el mundo no muestra amor todos los días (es cosa de ver la tv). El amor es en realidad parte de la esencia de Dios, el cual puso esta esencia en nosotros, la capacidad potencial de amar si así lo decidimos. Es un regalo que no se compara con nada más sino con el hecho de que Dios nos amó primero. Él creo todo cuanto existe para hacernos felices; las montañas, el mar, las estrellas ¡Todo! En su creación Dios manifiesta su amor para con nosotros.
Pero su mayor muestra de amor fue enviar a su Único Hijo Jesús a dejar su trono de Gloria y vivir como un mortal como tú y yo, vino a sufrir el desprecio de su propio pueblo, fue humillado cargando una culpa que no tenía, murió en la cruz por nuestros pecados, los cuales nos separaban de Dios, para que pudieramos entrar al cielo, y finalmente resucitó para ir a reinar con el Padre al cielo y preparar un hogar para nosotros allá.
Pero su mayor muestra de amor fue enviar a su Único Hijo Jesús a dejar su trono de Gloria y vivir como un mortal como tú y yo, vino a sufrir el desprecio de su propio pueblo, fue humillado cargando una culpa que no tenía, murió en la cruz por nuestros pecados, los cuales nos separaban de Dios, para que pudieramos entrar al cielo, y finalmente resucitó para ir a reinar con el Padre al cielo y preparar un hogar para nosotros allá.
Este es el más grande amor que jamás conocí. No el de mis padres, no el de mi esposo, sino alguien que me amó desde antes de nacer, alguien que se preocupa por mí cada día, que me llena de beneficios y de gozo en mi corazón.
A veces me pregunto ¿Podría haber vivido esta vida sin Dios? Claro que sí, pero cuando estaba sin Dios nada me hacía feliz, ni siquiera me amaba a mí misma. Ahora creo firmemente que Aunque podría vivir sin Dios, no cambiaría mi vida por nada. Tal vez no soy lo fiel que debería ser, le fallo como todos, no soy una hija perfecta para Él, pero Él decidió amarme igual, y yo no puedo más que amarle también.
HAY MUCHOS TIPOS DE AMOR, PERO EL MÁS GRANDE AMOR ES EL DE DIOS PARA CON NOSOTROS.
Así que la próxima vez que escribas algo en la arena, recuerda que DIOS TE AMA y que el amor es más lindo si es recíproco, Él también desea ser amado por ti.
HAY MUCHOS TIPOS DE AMOR, PERO EL MÁS GRANDE AMOR ES EL DE DIOS PARA CON NOSOTROS.
Así que la próxima vez que escribas algo en la arena, recuerda que DIOS TE AMA y que el amor es más lindo si es recíproco, Él también desea ser amado por ti.